Casi todas las acciones que realizamos son comunicativas. El lenguaje hablado es uno de los medios de comunicación más básicos para los seres humanos. Esta capacidad se desarrolla a lo largo del ciclo de la vida y abarca desde simples sonidos o palabras hasta la capacidad de construir elaboraciones complejas como obras literarias.
Sin embargo, para muchas personas esta capacidad se puede retrasar o alterar debido a varias causas. Estos cambios en la comunicación oral han sido estudiados por las ciencias como la psicología y la medicina, y a partir de ellos se han conceptualizado varios tipos de trastornos del habla.
Cuando el lenguaje falla: Trastornos del habla
La comunicación es fundamental para el desarrollo humano, como dije: muchas de nuestras habilidades de comunicación dependen del idioma. Sin embargo, el lenguaje no es algo que surja de repente, sino que hay que aprenderlo y desarrollarlo. El lenguaje en general es un elemento complejo que adquirimos y luego consolidamos durante nuestro crecimiento.
Algunas de las cosas que aprendemos a mejorar en nuestras etapas de vida son las habilidades de articulación, la fluidez, comprensión del lenguaje, el vocabulario y la capacidad de encontrar palabras, también aprendemos a cuándo y cómo comunicar ciertas cosas.
Si bien estas habilidades se adquieren en la medida que vas avanzando de la infancia a la adultez, algunas personas experimentan problemas, deterioro o mal desarrollo de la comprensión y expresión del lenguaje que limitan el correcto funcionamiento a la hora de comunicarse con los demás.
Aquí te presento algunos de los trastornos más habituales que limitan el desarrollo del habla.
Trastorno del habla o disfasia
Este trastorno es una alteración de la comprensión y del habla en niños, no solo en la parte fonética, sino también en otros aspectos como el lenguaje, la escritura o la lectura.
El trastorno del habla o disfasia puede ser progresivo, en cuyo caso no puede ser consecuencia de otros trastornos ni adquirido. En cualquier caso, el niño puede tener problemas de lenguaje expresivo o receptivo, es decir, el problema puede manifestarse a nivel de deficiencias cuando habla y también cuando interpreta lo que le comunican. Los niños con este trastorno suelen tener un vocabulario y una estructura gramatical reducidos, lo que hace que el lenguaje sea más débil y más restringido de lo esperado.
Dislalia o Trastorno fonológico
Otro trastorno importante del lenguaje oral es la dislalia. Se entiende por trastornos a aquellos en los que se producen diversos errores en la articulación de las palabras, siendo los más habituales la sustitución de sonidos, la distorsión de este, o la ausencia o adición de sonidos. Por ejemplo: un problema con la forma de la lengua puede provocar dislalia.
Si bien este tipo de problemas son comunes en la infancia y pueden considerarse dislalia, los errores cometidos podrían ser extraños para el nivel de desarrollo del niño y llegaría a afectar el desempeño social y educativo.
Disfemia: tartamudeo o trastorno del habla
La disfemia es el trastorno más conocido en la sociedad, a menudo nos referimos a este como tartamudeo. Es un trastorno que se centra en la ejecución del habla, específicamente en su fluidez y ritmo. Durante el discurso sufre uno o más repeticiones o bloqueos que interrumpen el ritmo normal de comunicación.
La disfemia a menudo se experimenta con vergüenza y miedo que a su vez empeora el rendimiento y dificulta la comunicación, así como adaptarse socialmente. Este problema solo ocurre cuando se habla con alguien, capaz de hablar normalmente en completa soledad, no es causado por daño cerebral o percepción alterada.
Suele comenzar entre los tres y los ocho años. Esto se debe a que esta edad es cuando el niño desarrolla el habla normal. Dependiendo de su duración se pueden encontrar diferentes subtipos de disfemia: progresiva (que dura unos meses), benigna (que dura unos años) o persistente (esta última es la disfemia crónica que se observa en adultos)
Disartria o trastorno de ejecución del habla
Se refiere a la dificultad para articular palabras debido a un problema neurológico, provoca que la boca y los músculos que producen el habla no produzca el tono correcto y por lo tanto no responden adecuadamente. El problema no es tanto con los músculos (aunque sufren de abuso a largo plazo) sino con los nervios que se conectan a ellos. Es uno de los trastornos más conocidos.
Trastorno de la comunicación social
Este trastorno se caracteriza por la dificultad que tiene la persona para comunicarse socialmente y para interpretar el significado del mensaje que se le trasmite. Las personas con este problema tienden a cambiar las conversaciones y la forma de transmitirlo cambiando el contexto de la conversación.
Disglosia
Al igual que la disartria es un trastorno que causa una gran dificultad para articular los sonidos que componen el habla. En este caso, el problema radica en la presencia de lesiones de los mismos órganos orales, como malformaciones de la boca, lengua, etc. Por lo tanto, ya existen deficiencias fácilmente identificables en la morfología del habla.
Taquifemia
Es un trastorno del habla que se caracteriza por hablar muy rápido con falta de palabras y errores. Su aparición es común en personas con excitación intensa, sobretodo en personas que están en un episodio maníaco o un alto uso de estimulantes, también puede ocurrir en la infancia sin necesidad de cambios externos.
Afasia
Uno de los grupos de trastornos del habla más conocidos y mejor estudiados. La afasia se refiere a la pérdida o cambio del lenguaje en adultos (en niños se experimenta la disfagia mencionada anteriormente) debido a un cambio o lesión en el cerebro. Este tiene que ver mucho con lesiones cerebrales que dependiendo de la ubicación puede afectar la expresión, la comprensión o la escritura.
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